
La Pareja
As veces me quedo mirándola, reparando sus detalles, la curva de la nariz, un lunar pequeñito cerca de la boca, el brillo del pelo, cosas así, que reparan aquellos que aman. Ella, cuando percibe que la miro, pregunta: - ¿Qué pasa? – recelosa, quizá pensando que yo le reparo algún defecto, una legaña o un agujero en la falda. Yo, siempre le digo: - No pasa nada. – Pero si ella supiese, si supiese las razones que tiene el amor, no más me preguntaba. Cuando me sorprendiese así, mirándola, no me preguntaría más “¿qué pasa?”, y me diría sólo: - también te quiero.
As veces me quedo mirándola, reparando sus detalles, la curva de la nariz, un lunar pequeñito cerca de la boca, el brillo del pelo, cosas así, que reparan aquellos que aman. Ella, cuando percibe que la miro, pregunta: - ¿Qué pasa? – recelosa, quizá pensando que yo le reparo algún defecto, una legaña o un agujero en la falda. Yo, siempre le digo: - No pasa nada. – Pero si ella supiese, si supiese las razones que tiene el amor, no más me preguntaba. Cuando me sorprendiese así, mirándola, no me preguntaría más “¿qué pasa?”, y me diría sólo: - también te quiero.